En ocasiones resulta eficaz contar con una adecuada orientación profesional ante una situación que nos desborda. La orientación psicológica evita que las situaciones adversas afecten a la propia salud emocional y al bienestar familiar y social.
Los trastornos de ansiedad, de estado de ánimo, adaptativos, adictivos, de pareja, de personalidad, problemas de autoestima, falta de control de impulsos, baja tolerancia a la frustración y entrenamiento en habilidades sociales, son actualmente los más demandados.
En Espacio de Psicología evaluamos e intervenimos en los casos de dificultades emocionales, de aprendizaje y conducta de adultos y jóvenes. También trabajamos con niños la aparición de miedos, timidez, conductas agresivas y celos. Con la ayuda de las personas de su entorno el niño va superando las dificultades frecuentes en el aprendizaje, el rechazo al colegio, la ansiedad a nuevas situaciones y las dificultades en la relación con los demás.
Metodología
En el trabajo con adultos se establece una primera consulta en la que se informa de los aspectos relacionados con el proceso terapéutico a seguir en las siguientes sesiones.
«El que quiere cambiar siempre tiene una razón. El que no quiere cambiar, siempre tiene una excusa»
En el trabajo con niños la metodología que seguimos consiste en una primera entrevista con los padres para recoger la información significativa del desarrollo evolutivo de la conducta y personalidad del niño. El objetivo es reconocer las áreas de conflicto y los recursos personales para comprender al niño y acompañarlo en un desarrollo emocional saludable. El cambio en el niño se produce más fácilmente si los padres conocen como tienen que responder ante el comportamiento del niño.
«Los primeros años de la vida son como los primeros movimientos de una partida de ajedrez, dan la orientación y el estilo de toda la partida, pero, mientras no haya jaque mate, aún pueden hacerse bellas jugadas». Anna Freud.